La Corte Suprema dictaminó el martes que la policía no necesita una orden para registrar su propiedad. Inclusive cuando existen dos ocupantes en el lugar y uno no está de acuerdo con la entrada de la policía, estos sencillamente pueden arrestarlo y entonces, la policía puede entrar en la residencia.
En lugar de adherirse al requisito de la orden judicial, la reciente decisión permite a la policía obviarlo.
La mayoría, encabezada por el juez Samuel Alito Jr. A., dijo que la policía no tienen que tomar el tiempo para obtener la aprobación de un juez antes de entrar en una casa en estos casos. Pero los disidentes, encabezados por la juez Ruth Bader Ginsburg, advirtieron que la decisión erosionaría protecciones contra registros domiciliarios sin orden judicial. El tribunal había sostenido anteriormente que tales protecciones estaban en el "núcleo" de la cuarta enmienda y su prohibición de registros e incautaciones irrazonables.
Según el juez Samuel Alito la decisión del tribunal de 6-3 permite en lo adelante que si usted no esta en su vivienda no puede oponerse a que la policía revise su casa aun sin una orden judicial.
De ahí se desprende que si un ocupante está ausente debido a una detención legal o arresto se encuentra en la misma posición que quien está ausente por cualquier otra razón y por lo tanto no esta en posición de evitar un registro por parte de la policía en su vivienda.
En otras palabras, usted ha perdido parte de sus derechos sobre su propiedad y en lo adelante le sera mucho mas fácil a la policía espiar a través de sus objetos personales si así lo desea.
Las implicaciones para una interpretación peculiar de la cuarta enmienda son asombrosas. Esto puede y va a abrir la puerta un comportamiento más inescrupuloso por parte de la policía. Ellos sólo tendrán que decir que alguien puede estar en peligro, y ahora están justificados en saquear su casa.