Por muy difícil que sea después de analizar mucho debemos reconocer nuestros errores y el por que los cometemos. Vivimos momentos difíciles, donde se habla de libertad; mientras algunos luchan por ella otros cambian dignidad por ropa de moda.
Es muy difícil observar como golpean mujeres mientras una gran multitud se dedica a mirar como si fuera un espectáculo de circo romano. Nosotros tenemos parte de la culpa, muchos de los que se llaman patriotas se dedican a trabajar como si no existiera mañana, para comprar baratijas y ropa de moda que ellos no usan, pero llevan a Cuba como regalos, de esta forma consuelan a los que quedan de sus ganas de ser Yumas y mantienen al Dictador.
Hoy la apatía es general, la mayoría espera a familiares en sus viajes de regreso como un niño a Santa Claus en tiempos de navidad. La juventud de dedica a la diversión, vestidos muy a la moda sin importarles su libertad y con sueños de una salida como solución al problema.
Yo salí de Cuba joven pero con una conciencia política formada, no por economía o buscando vestir de moda, lo hice buscando libertad y un lugar donde poder denunciar los horrores que comete el Dictador. Nosotros nos quejamos de nuestros problemas, pero no hacemos nada por resolverlos, mas bien los alimentamos con los viajes de regreso a los que yo me opongo por dignidad y un problema propio de mi conciencia.
Mi padre me enseño a pescar desde muy niño, que es mas fácil a esperar que te den el pescado, esto me convirtió en un hombre independiente, debemos entender que cuando vistes a un esclavo no lo ayudas, mas bien prolongas su agonía y de esta forma pasas a ser cómplice del esclavizador.
Este mensaje lleva la critica para crear conciencia común de un problema de muchos y que de cierta forma nos perjudica a todos, los viajes a Cuba. Para quien me critica les contare que también tengo familia en la isla, pero yo Alejandro Rodríguez no cambio dignidad por ropa, prefiero luchar para que los míos tengan un futuro con vida propia, sin necesidad de migajas y donaciones que los ponen contentos por unos minutos para luego chocar con una realidad que los consume por sufrimiento, la dictadura que los controla.
Los cubanos somos una de las minoría mas poderosas en Estados Unidos y tenemos la solución ante nosotros, pero la tiranía nos impuso un miedo que no acabamos de superar, ellos no son invencibles, pero para triunfar se necesita despertar y comenzar a trabajar en base a una lucha digna y sin bajar la cabeza.
Ojala alguien despierte con mi mensaje, me despido como siempre.
"ABAJO LA DICTADURA"
Alejandro Rodríguez