Cuando finalmente esta época de “revolución” y socialismo acabe, que sin dudas va a acabar, va a costar mucho trabajo al cubano acostumbrarse a dialogar, a negociar y a dejar de querer imponer su idea como la única. También va a ser muy difícil deshacernos de los caudillos, porque creo que en cada cubano hay una semilla de un caudillo, que quizás nunca llegue a germinar si no cuenta con las condiciones adecuadas, pero que siempre esta ahí latente, dormida esperando una oportunidad propicia para manifestarse.
Me gusta la frase de Yoanis Sanchez "no se trata de brillar, sino de que haya luz" No necesitamos brillantes caudillos que nos iluminen ni nos guíen, no necesitamos a papa gobierno que nos obligue ha hacer lo que supuestamente "es lo mejor," necesitamos cada uno tener el derecho a pensar lo que queramos y a expresarlo, pero aun así, tener suficiente inteligencia como para ponernos de acuerdo con quienes piensan diferente y progresar, salir de el atraso y la oscuridad en que estamos detenidos durante ya mas de medio siglo, todo gracias al supuesto brillo de quien ha terminado por ser mas bien un agujero negro, Fidel Castro.
